![Banca en un jardin bajo una pergola](https://static.wixstatic.com/media/9efd94_d3fc02ef1d794087b81389a2de7deca6~mv2.jpg/v1/crop/x_173,y_0,w_626,h_872/fill/w_560,h_780,al_c,q_85,usm_0.66_1.00_0.01,enc_avif,quality_auto/Create%20a%20beauti%201%20(1)_edited.jpg)
En este pequeño rincón
A lo largo de mi vida, he tenido muchas ocasiones en las que he observado que hay personas, empresas y lugares que ponen su mejor esfuerzo para lograr algo, pero a veces las cosas no salen como esperábamos. En esos momentos, a menudo he deseado tener a alguien que se sentara conmigo y me brindara apoyo y orientación. Alguien que me dijera cómo crear un currículum de manera efectiva, que me ayudara a entender y organizar mi presupuesto, o simplemente me acompañara en la decisión de qué cocinar hoy.
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Hay tantos aspectos de la vida que parecen simples pero que nadie nos enseñó, explicó o mostró cómo abordarlos. En esos momentos, tener a un amigo cercano dispuesto a explorar junto a mí, compartir sus conocimientos y experiencias, sería invaluable. Contar con alguien que se siente a mi lado y se tome el tiempo para comprender mis inquietudes y necesidades sería un regalo.
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A veces, la vida puede ser complicada y abrumadora, pero con el apoyo de un amigo genuino, se pueden encontrar soluciones y nuevas perspectivas para enfrentar los desafíos diarios. La idea de tener a alguien que esté dispuesto a enseñar, guiar y simplemente estar presente en esos momentos de incertidumbre, es reconfortante y alentadora. En definitiva, valoro la importancia de contar con conexiones significativas con otros que estén dispuestos a compartir y crecer juntos en el viaje de la vida.